Reformar su empresa es un proceso que no debe precipitarse. No es algo que pueda lograrse de un solo golpe. Por el contrario, debe ser un proceso continuo que puede llevarse a cabo a lo largo del tiempo y no aplicarse simplemente en un momento dado. Esto no significa que no deba emprender nunca ningún tipo de reformas integrales Zaragoza. Al fin y al cabo, toda empresa necesita ajustar sus operaciones para adaptarse a los cambios que se producen en toda la empresa. Sin embargo, sí significa que debe comprender qué tipo de reforma se está llevando a cabo y cómo afectará a su empresa en el futuro. En este artículo, hablaremos de seis tipos diferentes de reestructuración empresarial y de cómo pueden afectar a su empresa. También le ofrecemos algunas ideas importantes sobre las razones por las que cada tipo de reestructuración puede ser o no adecuado para su empresa.
Fusiones y adquisiciones
Una empresa puede decidir adquirir otra empresa para obtener una ventaja competitiva. Por ejemplo, puede decidir comprar un competidor para aprovechar su falta de personal o una oportunidad para entrar en un nuevo mercado. También puede adquirir una empresa como resultado de un intento de adquisición por parte de un competidor mayor. En todos estos casos, su empresa se fusionará con la empresa adquirente o será adquirida por ella. Esto supondrá un gran cambio para su empresa. Como mínimo, tendrá que llevar a cabo un plan de reestructuración que ajuste la propiedad, el control y la gobernanza de su empresa.
Consolidación
Una consolidación es un tipo de reorganización empresarial en la que la propiedad y el control de la empresa se dividen entre los accionistas y los directivos de la entidad consolidada. Tras la consolidación, cada empresa que opera dentro de la entidad fusionada está obligada a adoptar las mismas prácticas empresariales que las demás empresas del grupo. Esto puede causar problemas a las empresas más pequeñas, a las que les resulta más difícil adoptar las prácticas del grupo más grande. En estos casos, una fusión puede no ser una buena idea. En su lugar, su empresa puede optar por un enfoque menos combinado y formar una entidad separada del resto de la empresa. Este podría ser el caso si usted opera en un mercado más pequeño, por ejemplo.
Cambio de propiedad
En algunos casos, una empresa decidirá salir a bolsa en lugar de reestructurarse. OPI es la abreviatura de “oferta pública inicial” y se refiere a la oferta pública inicial de las acciones de una empresa en una bolsa de valores. Una empresa puede salir a bolsa cuando desea recaudar fondos para ampliar su negocio o cuando quiere hacer un cambio estratégico en la práctica empresarial. Por ejemplo, un fabricante de automóviles puede decidir salir a bolsa con el fin de recaudar fondos para ampliar sus instalaciones de fabricación o para entrar en nuevos mercados. En todos estos casos, la empresa tratará de recaudar fondos mediante la emisión de acciones en el mercado bursátil. El objetivo de la oferta es hacer llegar a los accionistas la mayor cantidad de dinero posible con la mayor rapidez. Una vez cotizadas y negociadas las acciones, la empresa entregará los beneficios a los accionistas y pondrá fin al proceso de oferta.
Reestructuración de la deuda
Una reestructuración de la deuda es un tipo de reestructuración en la que se reduce o se perdona toda o parte de la deuda de una empresa. La deuda que se reestructura puede ser un crédito a corto plazo o una deuda a largo plazo. La condonación o reducción de la deuda suele estar motivada por el fracaso o la quiebra de una empresa. En todos estos casos, su empresa tendrá que diseñar un plan de reestructuración de la deuda que cumpla los requisitos específicos establecidos por el gobierno y las instituciones financieras de las que depende. Esto incluye el tipo de reestructuración y el importe de la deuda que se condonará o reducirá.
Plan de compensación diferida
En algunos casos, se puede ofrecer a los ejecutivos y a los miembros del personal planes de compra de acciones para empleados (ESPP) u otros planes de compensación diferida. Cuando se ofrecen estos planes, suele ser con la condición de que el empleado permanezca en la empresa y siga trabajando con un nivel salarial determinado. Por ejemplo, supongamos que una empresa ofrece un ESPP que permite a los empleados comprar acciones a un precio determinado a cambio de una cantidad fija de dinero. Si el empleado quiere marcharse, puede simplemente vender las acciones en la bolsa y recuperar su dinero. Sin embargo, puede darse el caso de que una empresa prefiera mantener a algunos empleados pero ofreciéndoles otro tipo de compensación. En este caso, la empresa podría cambiar su estructura organizativa para dar a los empleados una serie de incentivos para que permanezcan en la empresa, pero permitiéndoles elegir entre una variedad de planes de compensación.
Plan de compra de acciones para empleados
En algunos casos, el gobierno puede aprobar una norma que facilite a las empresas ofrecer planes de compra de acciones para empleados. Esta norma podría permitir a las empresas ofrecer planes de compra de acciones para empleados libres de impuestos. También podría permitir ciertos límites en la cantidad de acciones que se pueden comprar. Esta última opción sería útil para las empresas que quieran ofrecer planes de compra de acciones para empleados a un grupo selecto de empleados, pero no a toda la empresa.
Conclusión
Una reestructuración es un cambio que emprende una empresa para gestionar sus finanzas y realizar cambios que mejoren su situación financiera. Una reestructuración puede ser positiva o negativa en función del resultado. Desde el punto de vista positivo, una reestructuración puede mejorar la situación financiera de una empresa y permitirle operar de forma más eficiente. También puede dar lugar a la adquisición de otra empresa que puede utilizarse como fuente de ingresos o como amortiguador de los cambios en el modelo operativo de la empresa. En el lado negativo, una reestructuración también puede ser perjudicial, ya que puede crear mucho papeleo y causar trastornos a los empleados y clientes. También puede llevar más tiempo completar los proyectos y puede dar lugar a mayores costes de materiales y servicios. Como puede ver en los ejemplos proporcionados, cada tipo de reestructuración tiene ventajas e inconvenientes específicos que las empresas deben considerar antes de emprender una reestructuración. Lo mejor es entender los tipos de reestructuración que puede encontrar su empresa y desarrollar un plan de reestructuración en consecuencia.